Esta es la tercera parte del análisis oceanográfico de Barahona.
Como explicamos anteriormente, las playas de Barahona del 2008 al 2010, eran las mejores de toda la ciudad de Barahona, especialmente El Quemaito, el cual, a veces, también se utilizaba para atacar el aburrimiento de muchas personas. Además, la playa era muy promovida por los estudiantes de la UASD y los ministerios Medio Ambiente y Turismo, las cuales inclusive dijeron en ese tiempo que las arreglarían para mejorarlas aún más que cuando estaban antes.
Ahora bien, ya llegó la hora de la verdad, para descifrar qué fue lo que pasó en realidad con las playas de Barahona
2013-2017
A partir del 2013, las playas de Barahona comenzaron a tener un aumento de la profundidad, el cual se tradujo en una menor capacidad para que los bañistas pudieran bañarse en las mismas. El color azul turquesa de la playa El Quemaito, fue desapareciendo paulatinamente hasta que un fuerte viento del sureste muy anormal, la comenzó a afear gravemente hasta convertirla en una playa de arrecifes.
El tradicional oleaje que solía estar en la playa, desapareció por completo, hasta que, al 2014, comenzó una enorme sequía que agravó su estado, lo que se tradujo en piedras con limo aún más grandes que los anteriores, y arrecifes que llegaron hasta la costa. A partir del 2015, las cosas fueron empeorando aún más todavía, hasta que, llegó el más temido fenómeno de la historia, y quizá, hasta el culpable más conocido por dañar nuestras playas; el fenómeno del Niño.
Pero El Niño del 2015 no fue igual al del 2009. Comenzó anormalmente a intensificarse a partir del mes de octubre, donde las temperaturas de las costas de Perú, alcanzaron umbrales de hasta 3 grados centígrados, lo que lo convirtió en uno de los fenómenos más intensos de la historia, el cual, debido a su fuerza, desde el 2013 ya estaba provocando efectos muy negativos en las playas de Barahona.
El fenómeno del Niño alteró los vientos del Este, lo que los hizo desaparecer por completo hasta el día de hoy, y ahora las playas de Barahona están más dañadas que nunca, es decir, muy deterioradas a causa del intenso oleaje causado por el dañino viento del Este, el cual nunca se había presentado en nuestras playas en el período pasado, lo que alteró aún más lo ecosistemas.
Tampoco olvidemos las algas pardas, las cuales comenzaron desde el 2011, pero que fue paulatinamente intensificándose a partir del 2015, lo que provocó serios problemas en nuestras playas, y cambiaron los vientos que solían soplar en las cuaresmas y en temporada de huracane.
Continuamos en la cuarta parte
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