Ya tenemos El Niño nuevamente presente en el Pacífico Ecuatorial, apenas 8 años después del anterior. Wow!! Y ahora. ¿Qué vamos a hacer?
Habían sido demasiados los problemas que ocurrieron hace 8 años atrás, en el 2015; la sequía, el deterioro de las playas de la costa de Barahona, la muerte de reses en la región sur y el descenso de las aguas de las presas de todo el país, lo cual hizo de esta experiencia un verdadero horror para mi, como ustedes ya lo vieron, y aquellas situaciones pusieron a prueba nuestra resistencia ante estas situaciones que realmente perjudicaron grandemente a todo el país. Pero ahora, luego de apenas 6 años de un pequeño progreso en el clima con Niñas en invierno retrocedimos nuevamente hacia atrás.
Lo que queremos decir que el peor de los temores, se acaba de concretar; el fenómeno del Niño ya comenzó en el Pacífico Ecuatorial, lo cual nos acaba de partir el alma por completo. El fenómeno de la sequía está nuevamente con nosotros, y según la NOAA, se extenderá hasta abril del 2024. El bendito problema realmente es cómo surgió este fenómeno nuevamente; con tres fenómenos de La Niña en los inviernos. Ahí es que está el verdadero error del ENSO, porque por lo menos El Niño Godzilla 2015 no antecedía a ninguna Niña antes de su formación, y este Niño actual debió por lo menos esperar hasta el 2024 o 2025 para volver a surgir, por lo que acabamos de mencionar de las 3 Niñas.
Ahí se dan cuenta del masivo descontrol que tenemos en el ENSO. El fenómeno del Niño, comenzar de esa forma, porque no es normal que luego de 3 Niñas en invierno El Niño haya surgido así de repente. Y ni siquiera estas 3 Niñas han favorecido en lo absoluto en ningún caso en ninguna área de nuestro clima, porque surgieron en una época errónea, que es el invierno, y ello ayudó a ser cortas y muy débiles en comparación al 2010, pese a que digan que La Niña del 2022 fue moderada. Y eso es lo que ustedes tienen que entender.
Y ahora, mira lo que pasa, tenemos al Niño Malware nuevamente, cuando dijimos en el 2017 que no volviera a surgir nunca más. ¿Se acuerdan de esa publicación en este blog? Pero es que este clima no escucha, no escucha señores. Y nada de nuestras quejas son solucionadas en lo absoluto. ¡¡¡Bendito sea Dios!!!!
Ahora bien. Según los pronósticos, El Niño actual posiblemente no tendrá influencia sobre el Caribe, ya que el reflejo de sus efectos en nuestra área están siendo opacadas por masas de aguas cálidas en el Atlántico récord que podrían inhibir los efectos de este fenómeno. Eso hay que destacarlo. Pero, ¿y dónde se queda el cambio climático en el 2024?
Bueno. Lo único que nos queda por ahora es suplicarle a Dios de que este fenómeno del Niño no se extienda mucho, y que por lo menos para el 2024 llegue nuestra ansiada Niña clásica veraniego que tanto hemos esperado desde el 2016, como siempre lo había hecho un Niño en otras épocas pasadas, como en el 1997 o 1982. El problema está en que el calentamiento global se verá incrementado de una manera muy peligrosa para ese año, y otra cosa; tampoco le tenemos mucha confianza al fenómeno de La Niña luego del desagrado que cometió en el 2016 de surgir en invierno. Eso fue lo peor que pudo haber ocurrido en el ENSO, y quizá posiblemente aquello vuelva a pasar en el 2024, y ahí si sería verdad que el planeta no sobreviva mucho tiempo.
Quizá es hora de suplicarle con fuerza a Dios de que lo de aquél 2016 no se vuelva a repetir nuevamente y que este fenómeno de La Niña pueda surgir con todas sus fuerzas en verano de ese año. Esperamos que así sea.
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