La mayoría de los efectos en el planeta son por el cambio climático; sin embargo, algunos de éstos pueden ser señales de la intensificación y desarrollo de La Niña
El cambio climático continúa haciendo de las suyas; las temperaturas continúan incrementándose en el planeta, los efectos del mismo asechan a las diferentes ciudades y países del mundo, y los deshielos son cada vez más evidentes. Sin embargo, a pesar de todo esto, La Niña ya está aquí con nosotros; el problema (y es mínimo), es que todavía no ha tomado consistencia debido a que solamente estamos en su comienzo, no en el desarrollo que podría tomar a partir de fines de este mes, lo que significa que todavía habrá que esperar que esto pase para luego decir los efectos que tendría el mismo sobre nuestro planeta.
La Niña, el cual es el fenómeno opuesto al Niño, no se muestra en el mapa, aunque los vientos y umbrales si muestran su inicio. Además, no se espera mayor indicio del mismo hasta que pase por lo menos el 23 de diciembre, donde finalmente, como les explicamos, podría comenzar con su desarrollo y consistencia.
Por esto, todavía no se puede definir, y no se sabe ahora qué intensidad tendrá o cómo será o la duración. Lo que si sabemos, es que su desarrollo, de concretarse a fines de este mes, a partir de ese momento, a enero, si se podrá declarar a la República Dominicana en estado de inversión, porque la presión atmosférica en el Caribe podría descender drásticamente a tan sólo unos 993 mb, presión lo suficientemente bajo como para provocar fuertes lluvias en todo el país y el Caribe, pudiendo resultar en inundaciones, especialmente en la costa caribeña.
Además, nevará en el Ártico y comenzará el verdadero frío del invierno, pero de forma tardía. Por lo que, no hay que desesperarse.
Debido a esto, debemos estar preparados, porque uno no sabe que es lo que pasará. Así que, atentos.
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